El masaje tántrico está «de moda»? Con connotaciones eróticas y disfrazadas de «orientalismo», los medios de comunicación en internet se ceban con estos tópicos y empañan los beneficios de este tipo de masajes. Lejos de dichas consideraciones, y tras haber resituado al tantra en el vasto mundo de la espiritualidad india, el libro de Claire de Lys es una herramienta útil para el aprendizaje del masaje tántrico individual, en grupo o en pareja. El masaje tántrico consiste, para empezar, en un reencuentro entre quien da y quien recibe, algo que no puede producirse sin que se haya establecido previamente un acuerdo entre el sujeto receptor y quien practica el masaje. Aprender a aplicar masajes no es sólo la adquisición de un método natural y eficaz para calmar el estrés, las tensiones musculares y los problemas emocionales, sino que también consiste en aprender a desarrollar el propio potencial de curación y descubrir el placer de aliviar a los demás.
El masaje tántrico, del mismo modo que el masaje ayurvédico, sigue las redes energéticas del cuerpo humano, pero también actúa sobre los chakras y se centra en la zona de los riñones. Dinamiza, aporta energía y armoniza para, finalmente, actuar en nuestro estado general de salud.
Permite a las parejas despertar su sensibilidad y su sensualidad, y redescubrir el tacto, un lenguaje tan universal y antiguo como el mundo. Los dos compañeros se imbuyen por completo en el placer de cada caricia, sin que exista necesariamente un objetivo sexual o erótico, que conduce a un camino amoroso mucho más rico, así como a una sexualidad mucho más amplia.
Con sus numerosas fotografías, sus instrucciones paso a paso y sus claros consejos, la obra de Claire de Lys enseña a cada uno, de forma limpia y atractiva, el poder del tacto, al mismo tiempo que ofrece la posibilidad de descubrir la fuerza vital que se halla dormida en nuestro interior.