El mundo se le viene abajo a Kate cuando su hijo Luke mata accidentalmente a su padre, Owen, mientras estaban cazando. El terrible acontecimiento deja mella en la vida de ambos, pero mientras Kate intenta rehacer su vida, Luke empieza a tener compañías nada recomendables. Tras la muerte de Owen, Kate se convierte, además, en una viuda rica y atractiva para muchos hombres, entre los cuales aparece Jack, un antiguo novio que tratará de reanudar su relación con ella. Kate encontrará paz y consuelo en él, pero por poco tiempo: Luke es secuestrado y sus captores amenazan con devolverlo a trozos si no reciben dos millones de dólares en las próximas treinta y seis horas…