Aunque a lo largo de cada capítulo de los que presenta este libro, al comienzo, pero también en su transcurso, pretendemos hacernos eco de las discusiones metodológicas más acordes con el tema que tratamos, nos ha parecido oportuno empezar por plantear una visión general, que siempre es inexcusable.
El temor que nos asaltó a la hora de concebir y desarrollar el presente estudio es que fuese un examen de un espacio físico dado, dimensionado por la acción social del hombre, en el que importase más el territorio que los hombres que lo ocuparon y formaron. La fácil tentación de caer en la fase más puramente descriptiva y la simple acumulación de informaciones, no todas del mismo valor, era lo que había que vencer desde un primer momento. Para ello, era preciso una fuerte discusión metodológica y una lucha constante por depurar, en la medida de lo posible, los datos, con objeto de ofrecer categorías analíticas y no sólo históricas.